«Hicimos la denuncia en la policía, pero desafortunadamente no obtuvimos respuestas» -contó Alberto-. Desde la Comisaría dijeron que desconocen el tema.
Alberto, de 25 años, publicó en un grupo de Facebook local muy leído, lo que les sucedió a él y a su pareja Esteban (28), ayer a la tarde, en la Plaza 25 de Mayo. Si bien el texto finaliza comentando que «hicimos la denuncia en la policía, pero desafortunadamente no obtuvimos respuestas. No nos han ayudado», desde la Comisaría dijeron que desconocen el tema.
A continuación el relato textual de Alberto:
Nosotros somos de Bahía blanca (Buenos Aires). Hace dos meses que vivimos aquí en Arroyito. Hermosa ciudad por cierto. Agradable para nosotros que vinimos aquí en busca de tranquilidad. Nuestra ciudad anterior se volvió muy insegura, entonces decidimos ir en busca de una mejor vida, y caímos aquí en Arroyito.
Lo que sucedió hoy [por ayer jueves 1 de septiembre] en Plaza 25 de Mayo alrededor de las 19:00 horas, me hizo considerar el tener que irnos de la ciudad, ya que sentimos que ustedes aun no están listos para convivir con gente de nuestra condición sexual.
Somos una pareja joven. Yo de 25 y mi novio de 28. Ambos felices y próximamente seremos un matrimonio. Lo que sucedió fue lo siguiente: estábamos en la plaza, y como ambos somos muy cariñosos, estábamos abrazados sacándonos fotografías […] Luego nos levantamos y nos fuimos a la fuente de agua, ambos abrazados mirando, y frena un auto. Eran tres personas, de sexo masculino. Se bajaron y nos agredieron salvajemente. No nos hicieron daño, pero nos han insultado de miles de formas. No diré las palabras ya que me parece muy degradante. Pero eso no es todo: luego de lograr que se vayan, traté de consolar a mi novio que estaba muy mal; ambos perplejos por lo que acabábamos de presenciar. Lo abracé y le di un beso, como toda pareja hace cuando la persona que ama está mal. Y pasó un grupo de señoras, que nos agredieron terriblemente. Lo que me sorprende es la educación de esas señoras, que al parecer no la tienen por la forma en la que nos trataron.
A lo que voy con esta publicación es tratar de entender qué es lo que sucede, que no podemos ser felices en ninguna parte del planeta. […] Esta situación me duele mucho, a mí y a mi novio. Hay demasiadas personas homofóbicas aquí en la ciudad, pero lo que sucedió hoy no es nada. Nos ha pasado cosas peores en otros puntos de la ciudad. Somos personas comunes y corrientes, con un trabajo, una casa y una mascota. No le hacemos daño a nadie, no lastimados a nadie y menos agredir a nadie. Nos amamos, y luchamos cada día contra las personas homofóbicas que nos quieren ver fuera de la ciudad. Eso es todo.Hicimos la denuncia en la policía, pero desafortunadamente no obtuvimos respuestas. No nos han ayudado.