Papá Noel sobrevoló La Francia con su trineo led

Roberto Casado convirtió su parapente motorizado en un trineo luminoso con renos, surcando el cielo para el disfrute de grandes y chicos.

Roberto Casado es un vecino de La Francia, que se propuso iluminar el cielo de su localidad llevándoles alegría a los niños del lugar. Roberto practica paramotor, deporte para el que se requiere de una aeronave conformada por un pequeño motor de hélice y un parapente.

En diálogo con EL ARROYITENSE, el protagonista de esta historia detalló cómo transformó su parapente motorizado en el vehículo de Papá Noel: “Esta vez lo adapté, le hice una silueta de hierro con la forma de los renos y el mismo paramotor cumple la función de trineo. A la silueta le adecué unas luces led, muy livianas, de bajo consumo y que tengo la opción de usarlas con la batería de 12 volts, para el motor. Lo he usado para volar de noche. Lo tenía preparado para el 24, pero no se pudo por los vientos fuertes y la tormenta; ya que el tiempo no componía”.

El parapentista sobrevoló La Francia vestido como el emblemático personaje vinculado a la Navidad y manifestó que “Esto surgió desde hace un año para la misma fecha, que lo he visto en Internet, en otros lugares lo habían hecho y sí, es posible hacerlo con este sistema de vuelo. Es algo que vuela despacito, que lo puede apreciar casi todo el mundo desde abajo, va pasando despacio, uno puede hacer giros en el mismo lugar, pasar repetidas veces, tratar de pasar más bajo”.

Además comentó que la idea se le ocurrió “Pensando en los niños. No es un regalo para grandes, es un regalo para los más pequeños, que son tan vulnerables, están formándose sus propias ideas, sus sueños, sus ilusiones, sus expectativas. Es traerles un poquito de alegría y despertarles algo que les sea útil, de ver algo que  venga desde el cielo, que no trae regalos materiales. La idea es motivarlos, es despertarles algo en sus pensamientos, sus ilusiones…”.

Sobre el final, Roberto se mostró contento con la trascendencia de su iniciativa que, según sus propias palabras, “funcionó, tuvo muchísima repercusión acá en la localidad, los chicos quedaron todos contentos y los padres doblemente contentos, por la alegría de sus hijos viendo hacia el cielo. A las nueve y media, en una noche bastante oscura, pasó el trineo volando con sus luces led bastantes resplandecientes, que se veía desde muy lejos. Esa era la idea”.