Una multitud de fieles caminó por las calles adyacentes a la iglesia del sector sur, con la imagen del Patrono de los Trabajadores.
La festividad de San José Obrero, coincide el 1 de mayo con el Día Internacional de los Trabajadores. Suele ser una oportunidad en que los ocupados y desocupados piden al carpintero que interceda ante Jesús por sus reivindicaciones salariales, laborales y sociales. Desde el siglo pasado, esta jornada tiene siempre un significado profundo de unidad y comunión entre todos los trabajadores.
Por este motivo el domingo 1 de mayo, en la Iglesia San José del sector Sur de la ciudad, se realizaron la Santa Misa y Procesión encabezadas por el cura párroco, presbítero Gabriel Camusso, acompañado por el vicario parroquial, presbítero Marcelo Cereda.
El secretario de gobierno, Ignacio Cabello, la secretaria de acción social, Miriam Zagonel, concejales, tribunos de cuentas y demás funcionarios asistieron al acto litúrgico y la procesión. También asistieron representantes de instituciones y organizaciones, invitados por la Comisión Pastoral de Arroyito.
Camusso destacó en la homilía que la Iglesia tiene presente, en esta celebración de San José Obrero, a “todos los trabajadores, en especial a quienes lo hacen en condiciones más difíciles”.
“Queremos agradecer a Dios Padre el trabajo que tenemos y lo hacemos por intercesión de San José, a quien le pedimos su protección y amparo; sin olvidarnos de los desocupados y de quienes carecen de lo suficiente para la propia subsistencia y la de sus familias”, recordó el cura párroco.
Tras asegurar que “la Palabra de Dios que acabamos de escuchar nos ilumina, y debe animarnos a tener siempre una verdadera esperanza” destacó cómo «Jesús conoció desde niño la dignidad y la cultura de trabajo».
El sacerdote subrayó que “el trabajo es un camino de realización, de dignificación y de justicia, que engendra seguridad y solidez para construir una vida más digna, justa y fraterna, y debe permitirnos alcanzar una mayor equidad, que posibilite a todos la participación en los bienes espirituales, culturales y materiales”.
Posteriormente se realizó la Procesión, en la que una multitud de fieles acompañó la imagen de San José Obrero que partió desde la iglesia recorriendo las calles Humberto Primo, Av. Dalle Mura, Alfonsín y Falucho. Luego, los feligreses regresaron al templo, algunos llevando consigo súplicas para la obtención de un trabajo y otros en agradecimiento a los favores recibidos.
Fuente: Prensa Municipal.