Diego Gudiño (22) recibió nueve años de cárcel por intento de homicidio, amenazas, tenencia de arma de fuego, robo y robo calificado.
Un joven de 22 años fue condenado a nueve años de cárcel luego de que lo encontraran culpable de una seguidilla de cuatro delitos que cometió en sólo dos meses.
De acuerdo a la acusación, tres de estos casos ocurrieron en nuestra ciudad y el restante en la vecina localidad de Tránsito.
En un juicio celebrado el miércoles 14 de diciembre en los Tribunales de San Francisco, un cómplice de 23 años recibió tres años y medio de cárcel.
En la audiencia participó como fiscal el mismo que instruyó la causa, José Argüello, de Arroyito.
Según el expediente, el raid delictivo ocurrió entre el 20 de septiembre de 2015 y el 28 de noviembre de ese mismo año.
En aquella víspera del Día de la Primavera, Diego Gudiño (22) se movilizaba en una bicicleta por la vía pública de Arroyito, momento en que abordó a otro muchacho que iba a pie.
Primero le solicitó 10 pesos para ingresar a un boliche, pero a continuación se abrió la campera, dijo que estaba armado y lo despojó de un celular y la billetera.
Un mes después, el 26 de octubre, Gudiño apareció en una plaza de Tránsito, donde amenazó a una pareja que estaba sentada en un banco. Incluso, los golpé y hasta sacó un arma de fuego, con la que disparó dos veces sin herir a nadie. Luego, se marchó.
“Parecía empastillado”, lo describió ya en sede judicial la joven agredida.
Gudiño otra vez sería noticia el 28 de noviembre, también de noche, cuando junto a Mauricio Villarruel (23) llegó en moto hasta una despensa de Arroyito.
El primero se bajó con un revólver calibre 32 y amenazó a la empleada, que cuando vio el arma salió corriendo. El joven extrajo dos mil pesos y se marchó.
Cuando huían en la moto, apareció en una camioneta el hermano del dueño del local comercial, que los persiguió unos metros hasta que los motociclistas se cayeron al suelo. Mientras Villarruel fue apresado por un grupo de vecinos, Gudiño amenazó con el revólver al conductor de la camioneta, que tenía a su hija de sólo tres semanas junto a él. Luego, escapó a pie.
Minutos después, cuando hacían la denuncia en la comisaría, las víctimas del robo lo vieron caminando a pocos metros, y cuando intentaron atraparlo, otra vez los amenazó con su revólver.
A la madrugada siguiente lo detuvieron en su casa.
Gudiño ahora fue condenado por intento de homicidio, amenazas, tenencia de arma de fuego, robo y robo calificado.
Fuente: La Voz del Interior.
