Los fieles católicos se volcaron una vez más a las calles céntricas acompañando la imagen de la Virgen de la Meced.
Por su grado de fe y participación, Arroyito fue declarada “Ciudad de María”. El responsable de bautizarla de ese modo fue el Obispo Emérito de San Justo, Monseñor Baldomero Carlos Martini, antiguo pastor de San Francisco entre 1989 y 2004.
Ayer, una Procesión que fue multitudinaria, revalidó esta denominación. Los fieles católicos se volcaron a las calles céntricas acompañando la imagen de la Virgen de la Meced, desde las 18:00 horas, cuando la temperatura era primaveral. En este caso, tanto la Misa de las 17:00 horas, como la caminata de los feligreses, fueron presididas por el obispo diocesano de San Francisco, Mons. Sergio Buenanueva.
La patrona de Arroyito fue trasladada, igual que el año pasado, en un carro realizado para tal fin, que estaba cubierto de flores naturales y artificiales. Además, volvieron las clásicas estaciones representando los misterios del Santo Rosario, a lo largo del recorrido; las cuales no habían sido incluidas en 2016.
La peregrinación se inició sobre calle San Martín, frente a la Parroquia, hasta llegar a 25 de Mayo donde se giró a la izquierda y se continuó hasta 9 de Julio, por la cual se arribó a calle Vélez Sársfield para recalar en la Plaza 25 de Mayo; lugar en el que se agolpó una multitud. En un sector vallado frente a la Virgen, se ubicaron las autoridades encabezadas por el intendente, Mauricio Cravero, y concejales.
La Banda Municipal dirigida por Gerardo Lemos fue la encargada de la musicalización de cada uno de los momentos. Sobre San Martín, y con la supervisión de la Policía, se produjo el tradicional desfile de las agrupaciones gauchas de Arroyito y la región; uno de los instantes más esperados por los presentes.
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A continuación, alumnos de la Escuela y Ballet Municipal de Danzas Folclóricas, interpretaron un cuadro, que resultó ovacionado por el público. A continuación, Cravero le otorgó la la directora del multipremiado elenco, Viviana Pedernera, un reconocimiento por sus Bodas de Plata. El cura párroco, presbítero Gabriel Camusso, agradeció a Pedernera y sus docentes.
Sobre el cierre de la Fiesta Patronal, integrantes de los diversos grupos de la Iglesia, quienes contaron con la colaboración de Enrique Poloni, realizaron la tradicional suelta del clásico rosario de globos. Los colores contrastaron con el opaco cielo, al grito de “viva María, viva la Virgen”.