Prevención de la conducta suicida: Psicólogos Autoconvocados dieron una capacitación

«Arroyito está en un corredor donde la conducta suicida tiene manifestaciones muy a menudo», explicó una especialista de Córdoba.

Psicólogos Autoconvocados de Arroyito y el Colegio de Psicólogos (delegación San Francisco) dieron una capacitación para fuerzas vivas de la ciudad, denominada «Detección y Prevención de la Conducta Suicida en la Comunidad», esta mañana en el Teatrillo Municipal José Francisco Guarch.

La licenciada Alejandra Rossi está encargada de la Casa del Joven en Córdoba, que depende de la Secretaría de Salud Mental del Ministerio de Salud provincial. Atiende una franja etaria de 14 a 20 años con problemáticas psicosociales en general y tiene programas donde se hace hincapié en trastornos alimentarios y consumo de drogas. La disertante expresó en un móvil para FM Top 99.9, que «Arroyito es siempre nuestro lugar de paso, porque está en un corredor donde la conducta suicida tiene manifestaciones muy a menudo. Hemos ido a Villa Concepción del Tío, Colonia Marina y San Francisco».

«El fenómeno del suicidio no es terreno de la salud mental (psicólogos y psiquiatras); es un problema comunitario. Por eso convocamos a las fuerzas vivas como primer paso. Es un fenómeno muy difícil de trabajar porque todas las estrategias para la prevención tienen que adaptarse a cada comunidad en particular. Se deben distinguir características sociales, culturales y de la vida cotidiana», agregó la especialista.

La idea es que las fuerzas vivas formen una red local que pueda juntarse de manera periódica a trabajar sobre el tema y las estrategias a implementarse para que las conductas no sigan ocurriendo.

«Uno puede ayudar desde Córdoba; venimos, damos las herramientas, empoderamos. Pero son las fuerzas locales las que tienen que tomar las propuestas y trabajar», explicó Rossi.

Según la psicóloga, la prevención es posible, porque del 100% de los casos, un 90% corresponde a una decisión tomada en una situación de crisis que no puede resolverse, y otro 10% puede vincularse a una psicopatología. Los pacientes con cuadros diagnósticos asociados a una buena medicación, tienen una vida normal.

«La idea del suicidio es universal. A mucha gente en algún momento se le ocurre. Pero de la idea al acto hay todo un proceso en el medio que se puede torcer», fundamentó la disertante y a continuación se refirió a los protocolos internacionales de la Organización Mundial de la Salud, que indican que los medios ejercen influencia sobre esta problemática. «La gente tiene que saber que hay muchos métodos de resolver problemas, que no sean quitándose la vida. La crisis desorganiza y no deja pensar. Es bueno difundirlo, pero no lo que uno reduccionistamente ve como la causa. Nunca hay una sola causa. Para que una persona se quite la vida, tienen que confluir múltiples causas. Y no confundir que un episodio haya sido el causal», opinó.