Franco Rossi notó que su gato “miraba mucho” hacia afuera. Cuando abrió la puerta encontró al ofidio y lo entregó a Bomberos.
Franco Rossi, un vecino de Barrio Arcor, se llevó una indeseable sorpresa en horas del mediodía de hoy, cuando volvió de su trabajo. Notó un extraño comportamiento en su gato, y halló que el felino había notado la presencia de un ofidio. “Yo tengo un gato y veía que miraba mucho. Cuando abro la puerta del patio de mi casa para ver qué pasaba, veo la víbora y cierro la puerta. Busco un Tupper (recipiente plástico) y se lo tiro arriba, no sé cómo hice, la enganché justo y la atrapé. Llamé un veterinario vecino que no estaba, pero sí su señora que entiende del tema. Apenas la vio dijo que era una yarará, muy venenosa”, explicó a EL ARROYITENSE Franco, quien aún no sale de su asombro por lo ocurrido en su domicilio.
La vivienda de la familia Rossi se encuentra al lado de la de la secretaria Privada del intendente, Marcela Ferreyra, que lo visitó cuando la noticia trascendió a través de las redes sociales. La funcionaria primero llamó a Defensa Civil y “le dijeron que ellos no podían hacer nada, que llamara a la directora del Hospital, para orientarla”, explicó el joven. Entonces Ferreyra se comunicó con la doctora Mónica Rodríguez y ella le explicó “que ahí (en el nosocomio) no tienen para extraerle el veneno, que eso lo hacen en el Serpentario de Córdoba, pero no tenían en qué llevar la víbora hasta allá”, completó Franco.
Rodríguez sugirió que llamaran a los Bomberos, que llegaron a la casa a la brevedad. Los voluntarios confirmaron la peligrosidad de la víbora. Según Rossi, “primero querían matarla, estudiar si realmente era venenosa, alertar a las autoridades y que sacaran algún aviso para que tuvieran cuidado. Pero después creyeron prudente no hacerlo. Quizá la iban a llevar a un campo lejos y tirarla, pero no sé qué hicieron”.
Sobre la yarará
De la familia de los Viperidae, este reptil, típico del paisaje del norte del país, es una serpiente que se caracteriza por su alto poder venenoso. También conocida como Víbora de la cruz, y de nombre científico Bothrops alternatus. Se caracteriza por su poderoso veneno, que la hace la víbora más temida en todo el territorio argentino, ya que provoca el 97% de los accidentes por ofidios venenosos a nivel nacional.
Medidas preventivas
Deben extremarse los cuidados en obras que afecten importantes extensiones de terreno (viales, hidráulicas, desmontes, etc.), y cuando se producen grandes cambios en la naturaleza (inundaciones, incendios, terremotos, etc.) Estas modificaciones provocan un considerable movimiento de la fauna –incluidas las serpientes-, concentrándose en zonas no afectadas. En caso de encontrarse algún ejemplar, comunicarse con Bomberos Voluntarios de Arroyito. Si se produjera una picadura, deberá trasladarse la víctima al centro asistencial más cercano, con la mayor rapidez posible.
Las fotos y los videos son gentileza de Franco Rossi.